Por fin, llegó la primera victoria de los nuestros en la Competición Liguera 2019/20, en la jornada 7, frente a la S.D. Solares Medio Cudeyo por 2-0.
Se produjo además dicha victoria con merecimiento, visto lo visto en el terreno de juego. No obstante, hay matices.
Se pudieron ver dos fases de juego en el mismo partido. Por un lado, un primer periodo de juego bastante anodino, falto de ocasiones de gol y por ende aburrido para el espectador. Buena culpa de ello la tuvo nuestro rival de hoy, el Solares, que jugó casi todo el partido con muchísima intensidad.
En el minuto 6, le fue anulado un gol a Iago por presunto y dudoso fuera de juego. El comienzo era esperanzador, ya un minuto antes Adrián ya había probado fortuna con un golpeo lejano que fue desviado de los tres palos.
Al cuarto de hora, llegó la primera para los visitantes, con un remate de cabeza, que Iván detuvo con autoridad. Diez minutos más tarde, en el 25, disparo lejano de los rojillos del Solares, que salió junto a la madera de la portería taniega.
En el 39, primer imprevisto para José Gómez, que veía como Pala se lesionaba en el hombro-clavícula, dando entrada a Marcos Fernández en el campo.
En el minuto 40, testarazo de Iago que no encontró portería.
Con empate sin goles en el marcador acabó el primer periodo, con un Trope dominador del juego y del tempo del partido, pero sin ser un partido brillante ni mucho menos.
El segundo periodo comenzó con la misma tónica, dominio estéril de los nuestros que veían como los minutos transcurrían sin el gol que nos diera los tres puntos. La primera fue para Marcos Fernández, que salía derrotado en un mano a mano con Luis en posición inmejorable para inaugurar el marcador.
La segunda fase del partido a la que nos referíamos anteriormente, se produjo más o menos con media hora de juego por disputarse, donde pareció que a los jugadores de Roncal, se les hacía largo el partido y el campo. Fueron los mejores minutos de los nuestros, que como en otros tantos partidos empezaron a generar ocasiones clamorosas de gol. Cuando nos referimos a «clamorosas», hablamos de ocasiones francas de gol, esas que casi siempre acaban en el fondo de las mallas. No había manera, la pelota, caprichosa, no quería entrar, entre otras cosas por el buen hacer del meta visitante, que tuvo intervenciones de mucho mérito.
La primera de estas clarísimas ocasiones la dispuso el bueno de Juan Fresno, en boca de gol. Su remate acabó fuera del marco. Sólo cinco minutos más tarde, mismo protagonista con idéntico resultado. Verlo para creerlo. Uno de los jugadores más efectivos y con más talento de la plantilla, no marcaba en inmejorable posición y por partida doble. La afición se frotaba los ojos, no acababa de creerse que el marcador aún reflejara empate a cero. Para colmo, sólo un minuto después, en el 76, era Perujo el que a quemarropa veía como el portero le blocaba la pelota con los pies.
Nos plantamos en el minuto 90, y el colegiado decreta cuatro minutos de prolongación. Uno de ellos necesitó Perujo para ganar línea de fondo por la derecha del ataque local, y servir al área pequeño donde Jorge, de manera inapelable cabeceaba al fondo de las mallas. Sí, era cierto, la pelota había entrado, y con ella el delirio en la grada, el primero de toda la campaña.
Se volcaron los visitantes en pos del gol que les diera al menos el empate, pero a la salida de un córner favorable a éstos, la pelota rechazada cayó en los pies de Perujo, que encaró a Luis, driblándolo y sirviendo en bandeja para que Jorge marcara su doblete particular y certificara la primera victoria de la presente Liga para los nuestros.
Esperemos que sea la primera de otras muchas.
Todo tiene un comienzo y un fin, incluso las malas rachas.
¡¡¡ Enhorabuena !!!